¡Llamando a todos los amantes de las alas! Tienes que hacer que este chuparse los dedos sea bueno. salsa de alitas de parmesano y ajo.
Está inspirado en la famosa receta de Buffalo Wild Wings.
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Esta deliciosa salsa combina el audaz y sabroso toque del ajo y la bondad del queso parmesano con sabor a nuez y picante en una base suave y mantecosa.
¿Pero adivina que? ¡No es solo para alas!
También puede engullirlo con verduras asadas, palitos de pan o incluso rociarlo sobre una pizza blanca.
¿Entonces, Qué esperas? Mejora tus alitas con esta salsa fácil de preparar y absolutamente deliciosa.
Salsa De Alitas De Parmesano Y Ajo
Entonces, has oído hablar de esa deliciosa salsa de alitas de parmesano y ajo, ¿verdad?
Ya sabes, ¿el que está inspirado en la súper famosa receta de Buffalo Wild Wings?
Como habrás adivinado, las estrellas principales de esta increíble salsa son el ajo y el queso parmesano.
Juntos, estos dos crean una increíble combinación de sabores que simplemente está fuera de este mundo.
El ajo aporta ese toque fuerte y sabroso que hace que cada bocado sea una verdadera delicia.
Y el queso parmesano, siendo el placer de la multitud que es, agrega su toque salado, de nuez y ligeramente picante.
¡No es de extrañar que estos dos se hayan convertido en el equipo soñado en la tierra de las salsas para alitas!
Ahora, no te olvides de la sal de cebolla y la pimienta negra recién molida.
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Agregan profundidad y un toque de picante que realmente une todo.
Y, por supuesto, ¿qué sería de una salsa para alitas sin una base sedosa?
Ahí es donde entra la mantequilla derretida, creando una base suave y aterciopelada que une todos esos deliciosos ingredientes.
Pero bueno, ¡no pienses en esta salsa de ajo y parmesano como un regalo exclusivo para las alas!
Es súper versátil y sabe muy bien con verduras asadas, como salsa para palitos de pan o incluso como base de pizza blanca. ¡El cielo es el límite!
¿Una de las mejores cosas de esta salsa? ¡Es pan comido para hacer en casa!
Con solo unos pocos ingredientes simples, puede preparar un lote casero en muy poco tiempo.
Además, cuando lo haces tú mismo, puedes modificar los sabores a tu gusto.
¿Quieres más ajo? ¡A por ello! ¿Necesitas una salsa más espesa? ¡No hay problema! Todo depende de ti, y pronto encontrarás tu propia versión de esta salsa favorita de los fanáticos.
Ingredientes
- manteca: La mantequilla derretida sirve como base para la salsa y lleva los sabores de los demás ingredientes.
- Queso parmesano: El queso parmesano agrega un sabor a nuez, salado y ligeramente picante a la salsa. Si está en apuros, puede intentar usar Grana Padano o Pecorino Romano como sustitutos.
- Polvo de ajo: Este potente polvo aporta un toque audaz y sabroso a la salsa.
- Sal de cebolla: Una pizca de sal de cebolla agrega profundidad y complejidad a la salsa.
- pimienta negra: La pimienta negra recién molida agrega un toque sutil de especias a la salsa, redondeando el perfil de sabor.
Cómo hacer salsa de alitas de parmesano y ajo
Simplemente siga estos dos sencillos pasos para hacer salsa de ajo, parmesano y alitas:
Consejos para la mejor salsa de alitas
Para hacer la mejor salsa de ajo, parmesano y alitas posible, sigue estos consejos:
- La calidad cuenta: Elija mantequilla y queso parmesano de primera categoría para realzar los mejores sabores en su salsa.
- Vaya fresco: Cambie el ajo en polvo por ajo fresco picado para amplificar el sabor audaz y contundente.
- Hágalo usted mismo: siéntase libre de ajustar las cantidades de cada ingrediente para que coincida con sus gustos personales.
- Dale sabor: para un poco de calor, agrega una pizca de pimienta de cayena o hojuelas de pimiento rojo.
- Lo fresco es lo mejor: opte por pimienta negra recién molida en vez de molida previamente para obtener un sabor más intenso y fragante.
- Espéselo: agregue más parmesano rallado o cocine a fuego lento la salsa un poco para lograr una consistencia más espesa.
- Sin lácteos: Reemplace la mantequilla con aceite de oliva o mantequilla de origen vegetal y opte por un sustituto de queso parmesano sin lácteos.
- Sabor a hierbas: agregue algunas hierbas frescas como perejil, albahaca u orégano para realzar la salsa.
- Sueño cremoso: agregue un toque de crema espesa o una cucharada de queso crema para darle un toque delicioso y cremoso.
Cómo almacenar
Mantén fresca la salsa restante colocándola en un recipiente hermético y refrigérala hasta por 3 días.
Para un almacenamiento más prolongado, opte por un recipiente apto para el congelador y congele la salsa hasta por 6 meses.
Cuando tenga antojo de un poco de bondad de ajo y parmesano, simplemente descongele su salsa congelada durante la noche en el refrigerador, ¡y estará lista para disfrutar!